2009/11/02

"La Mujer del Autobús". En El País

Interior, día. El doctor Richard Kimble, injustamente acusado del asesinato de su esposa, y que ha conseguido huir de la policía, entra en un hospital buscando pistas que le permitan dar con el verdadero asesino, un hombre con un brazo ortopédico. Camuflado como enfermero, aprovecha un descuido del personal para recoger y empujar por los pasillos una camilla en la que reposa un niño negro camino del quirófano. Médico ante todo, no puede evitar echar una mirada a la tablilla con los datos clínicos. Hay una anotación que no le convence, examina someramente al niño y corrige algo en el informe.

Exterior, día. Autobús urbano de Barcelona. Una mujer viaja agarrada a la barra y otra le mira insistentemente, sobre todo a las manos. Parece dudar pero finalmente se dirige a ella y le sondea sobre si ha notado ciertos síntomas. Que no. Le confiesa que es médica y le sugiere que se haga análisis de dos sustancias cuyo nombre le anota en un papel.

Un mes después, la mujer se hace esos análisis que revelan la existencia de un tumor en la hipófisis, entre cuyos efectos figura el crecimiento desproporcionado de los tejidos de las manos. Operada de urgencia, los médicos le dicen que la detección precoz de ese tumor, gracias a la analítica sugerida por la desconocida, le ha salvado la vida.

Interior, día. De vuelta del quirófano, la enfermera sospecha del desconocido y avisa a seguridad, acusándolo de haber manipulado el informe. "Pues le ha salvado la vida", dice una doctora mientras Harrison Ford emprende de nuevo la huida, perseguido por el implacable Tommy Lee Jones.

Primer plano de una página del diario La Vanguardia del 27 de octubre de 2009. "Ir en bus me salvó la vida", puede leerse bajo el epígrafe Carta al director. Una voz en off explica su contenido: una señora de 55 años que viajaba el 22 de enero, hacia las dos de la tarde, en un autobús de la línea 64 quiere conocer y dar las gracias personalmente a la señora de aproximadamente su misma edad que se dirigió a ella sugiriéndole que se hiciera determinados análisis médicos.

Página del diario del día siguiente: "La mujer del autobús logra conocer a la doctora que le salvó la vida".

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